HOMENAJE A MARIO SEIXAS-MILITAR Y ESCULTOR

Mario en activo, militar y escultor.

Exposición homenaje póstumo con la obra de Mario Seixas enSintra, inaugurada el día 5-9-10. En primer lugar podemos ver a su viuda y promotora de la exposición, Ana.

¿Pidiendo perdón? El no lo necesitaba, era buena persona

La sencillez, la simplicidad del buen trabajo

La realidad de la vida en esta escultura llena del vivir día a día a través de las vivencias del artista

Movimiento, elasticidad en un metal frío, pero al poner el alma en las manos para modelar lo envuelve, lo transforma en vida.

Se le ha hecho con todo merecimiento un homenaje al escultor Don Mario Seixas. Portugués, nacido en Sto. Tomé.

Homenaje póstumo en un lugar destacado de ese rincón que durante tantos años le vio trabajar, caminar, luchar y sobre todo, conocido por su humanidad. Mario fue un gran militar, todas sus condecoraciones fueron merecidas, todos aquellos que le conocíamos sabíamos de su bien hacer. Todos le respetábamos, en la milicia y en su trabajar como escultor. Merecedor de grandes premios internacionales, fue premiado en todos los certámenes donde presento sus trabajos. Hombre de estatura más bien pequeña, delgada, pero grande, tremendamente grande en bondad, sus manos modelaban el barro con el mismo calor que supo dar a toda su familia y a todos aquellos que tuvimos la suerte de estar cerca de él. Mario, un día se fue, partió a ese lugar donde todos al final vamos, pero su muerte fue igual que su trabajo, firme, sin lamentos, quizás con dolor físico, rodeado de su familia que era lo que primaba en él, sus seres queridos. Hoy todavía sigue entre todos nosotros, es como si hubiese posado un manto de protección para todos aquellos que le quisimos y le respetamos.

¿Premios? Consiguió muchos: Medallas de Oro, distinciones en Bellas Artes, Méritos a su vida militar, pero eso ahora ya no importa, tenemos su obra que nos recuerda cada día su bien hacer. Enhorabuena a ese lugar o rincón de Sintra que ha tenido la feliz idea de llevar tan buen trabajo para admiración de todos aquellos que tengan la suerte de pasar por sus salas.