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LA EPIDEMIA AZUL

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Portada: Higorca

Vídeo obras de José Higueras "el pintor de la luz"

miércoles, 1 de junio de 2011

HOLOCAUSTO

Oleo/tela - titulo: Holocausto - Autor: José Higueras Mora


Estos días el calendario ha estado repleto de actividades, era el momento de  estar pendiente de algunas noticias más o menos importantes. Todas  eran interesantes pero una me importo en verdad, una que es imposible pasar por ella de puntillas, por que queramos o no, es historia y todo lo que ha existido, sea más o menos: vergonzoso, o, doloroso, todo, es historia.
Se conmemoraba una vez más el holocausto en Alemania. Al recordar esas atrocidades mi piel se iba poniendo cada vez más erizada mientras pensaba ¿cómo un ser humano puede ser capaz de martirizar, de llevar a cabo esos asesinatos, sin nombre, y, luego ponerse o sentarse en una mesa para comer? O ¿acostarse en la cama para dormir? Porque pensándolo bien ¿Pueden dormir? No les importaba nada, no miraban la edad ¿Para qué? Ellos solamente les importaba matar y martirizar, el resto...
¿Se ha sabido cuantos murieron? O ¿Se ha sabido cuantos pudieron escapar a ese dolor? Eso es imposible, nunca se sabrá la verdad. Una vez hace años conocí a un señor español que tuvo que emigrar a Francia cuando la guerra civil española (terrible también) una vez allí lo llevaron a un campo de concentración, como tantos otros. Más tarde y siempre en el país galo, los nazis de nuevo lo apresaron y desgraciadamente fue a parar a otro campo pero este mucho peor, Auschwitz, el terror de los terrores.
Ese señor, cuando yo le conocí era ya, algo mayor, le gustaba salir a tomar el sol, cuando me encontraba siempre me paraba, era vecino y sabia como me gustaba escuchar, entonces él me explicaba cosas que a veces me tapaba los oídos disimuladamente para no oír: había conocido como se llevaban a las madres en vagones, apiñadas, cansadas de vivir en un mundo de dolor y de angustia.
Ese señor se salvó de casualidad, casi no podía caminar a consecuencia de estar en malas condiciones, otros ya, ni llegaban hasta esas horribles “duchas”, morían en los barracones, de hambre, de sed, de angustia pensando en el mañana, si es que llegaba.
Y… ayer recordé muchas otras cosas que me explicaba y también recordé un blog que he leído mucho por ser una historia viva de esos lugares, había veces que no podía seguir y de nuevo al día siguiente retomaba la lectura.
¡¡¡Me di cuenta de tantas cosas!!! Del dolor de los humanos por culpa de unas personas que solamente quieren poder y riquezas a costa de lo que haga falta: de matar, expoliar, robar. Si acaso sobreviven se sienten los salvadores de la Patria, fortuna amasada con aquellos pobres mártires. Así una detrás de otra: entonces, antes y, ahora, pienso que desde que el mundo es mundo, siempre perseguimos aquello que no es nuestro, aquello que nos es ajeno, pero que soñamos alcanzar algún día ¿a costa de qué?

5 comentarios:

Montserrat Llagostera Vilaró dijo...

Hola querida Higorca.

Realmente fue horrible.

El cuadro me gusta mucho.
deseo que estéis bien tanto tu esposo como tu.

Besos, Montserrat

Lola Fontecha dijo...

Es muy triste para mi forma de ser decirlo, pero no debemos olvidarlo para que no se repita..... Cuando leí el libro "El niño del pijama de rayas" lo pasé bastante mal, pero el desconocimiento de lo que se hacía en esos campos era generalizado. No llego a entender como alguien elegido democraticamente pudo llegar a ser un "asesino" ¿tanto cambia el poder, que las personas ya no cuentan? mmmmmm tengo esa duda amiga mia...

INTENTOS DE ESCRITORA dijo...

Cuando el hombre/mujer pierde el sentido de la razón de su vida, puede llegar a caer en lo más bajo. la crueldad gratuita es uno de esos abismos. Siempre, naturalmente, justificandose detrás de alguna razón ficticia e inalcanzable: como destruir toda una raza que habita su país y los que ocupa.
Hay que estar alerta para no volver a caer en la misma crueldad, pero los seres humanos somos tan débile de memoria,y tan llenos de orgullo, que, a veces, caemos en crueldades que hieren a los demás, aunque sean en menor grado y no nos damos cuenta de nuestro propio error. En cosas pequeñas y diarias, hacemos sufrir a los demás por motivos nimios, pero que pueden humdir a los demás en la tristeza. Es otra forma de ser cruel.
Tendremos que procurar hacer la vida agradable a los que tenemos alrededor para que sean felices. Por lo menos eso podemos intentarlo.
Me ha imnpresionado el cuadro de tu marido
Un abrazo fuerte.

MAJECARMU dijo...

Higorca,realmente como dices hemos de seguir recordando, para que el olvido no traiga de nuevo al "diablo interior"y la desolación humana.
Te felicito por ese temple claro y justo que te tomó la mano para redactar el post.De igual forma,el cuadro es testigo fiel de aquellos momentos,donde la luz grita y se corta,sin querer mirar a los ojos del hombre, víctima y verdugo.
Te dejo mi felicitación y mi abrazo inmenso.FELIZ SEMANA,AMIGA.
M.Jesús

Sil dijo...

Higor, para mí esta entrada es "mi talón de aquiles". Es una parte de la historia del mundo entero que creo que jamás lo podremos superar.
Fue y sigue siendo una tremenda herida en el planeta entero. Tengo historias reales de gente real que pudieron salir de esa pesadilla, las cuales hoy por hoy siguen quedando en mi mente sus relatos.
Gracias por hacer presente esta parte de la historia, que más que historia es una tremenda herida abierta en todos nosotros, porque más allá de no haberla vivido, creo que cada uno sin embargo la vivió en carne propia viendo películas, leyendo libros, escuchando a sobrevivientes, viendo documentales. Una herida que a mi humilde entender no cerrará jamás.